

Y David con Pato y Rufo a la bola con la mtb.
La crónica de David:
16 Octubre 2011 2ª SUBIDA A LA BOLA
A las 09,00 en Mataelpino, como el año pasado repetimos ruta Pato y yo, pero esta vez se nos unió Julio (Rufo en lo sucesivo), que tenía ganas de compartir el desafío de subir a la bola.
A eso de las 09,20 estábamos sobre las bicis y desde el mismo parking ya fuimos ganando altura hasta coronar nada más salir de Mataelpino el alto de las cabras, 1,5 km de ruta y ya estábamos calentitos. Al coronar dejamos la carretera de Becerril y tomamos el sendero paralelo que nos llevará hasta la Barranca, más senderos y hasta Navacerrada.
Una de las cancelas de la Barranca

Una vez en Navacerrada nos costó un poco callejear por donde siempre y terminamos tomando la carretera de Cercedilla casi en la rotonda de Navacerrada, así hacíamos el puerto de Navacerrada casi desde el principio. Subimos sin mayor problema hasta tomar el desvío a Navacerrada Puerto y girar a la izquierda hacia el Camino de Santiago, lo encontramos cortado por una competición de MTB, decidimos subir pegaditos por la derecha y pendientes de posible tráfico en dirección contraria, no hubo incidencias, a penas nos cruzamos con tres o cuatro bicis con dorsal.
Por fin llegamos al camino del Calvario, comienza suave y va tomando dificultad progresivamente, tanto en desnivel como en técnica, la zona donde Yeyo hizo su salto mortal hacia atrás está "arreglada", han compactado con cemento un buen tramo, justo las rampas más duras, hay que subir sentadito y apretando riñones para que no patine la rueda trasera, giro a la izquierda y continuamos por el Calvario, esta vez sin reparar, como siempre llenísimo de piedras y raíces, Pato subió creo que sin poner pie en el suelo pero a Rufo y a mí nos tocó soltar los pedales más de una vez, cómo se nota que andamos más por lo oscuro y tenemos las gordas medio abandonadas, seguramente por esto se me hizo el Calvario más largo que ningún otro día. Intentamos las escaleras del 32% pero solamente Pato consiguió subir, yo lo intenté solamente una vez porque las puñeteras escaleras me tienen desmoralizado, la primera vez que lo intenté los conseguí con relativa facilidad y desde entonces no he sido capaz de hacerlo de nuevo. Seguimos un trocito de carretera para coronar el puerto de Navacerrada.
Parte final de Puerto de Navacerrada

Llegada a Navacerrada Puerto, nos tomamos la Coca Cola de rigor mirando hacia arriba, hacia las antenas del alto de las Guarramillas (La bola), verlas allí en lo alto hace que te quedes chiquito y acongojado de la que nos espera, pero bueno.... al toro.
Pato no quería mirar lo que tenía detrás, alla en lo alto el telesilla y más allá están las antenas de la Bola.

Habíamos quedado que cada uno a su ritmo y como pueda, no hay otra opción, Rufo y yo tomamos la delantera y tras superar la barrera que da inicio a la ascensión afrontamos la primera rampa bajo el telesilla. Como es costumbre veo alejarse poco a poco la Mendiz de Rufo, cada vez lo veo más pequeño y más arriba, he decidido subir reservando probando cómo voy de fuerzas y de reservas que aunque solo son 3 km, hay sitio para dejarte las piernas en el intento. Esta primera rampa la hacemos con relativa facilidad, igual que la primera revuelta y primer paso bajo el telesilla, segunda revuelta, esta vez a la derecha, nos movemos claramente en desniveles por encima del 15%, tras esta segunda encuentro mi ritmo, delante llevo el molinillo pero detrás todavía me quedan tres piñones por subir y me encuentro bien, subiendo a ritmo y con relativa cadencia, por estos tramos el año pasado me iba arrastrando y ahora voy subiendo a 9-10 km/h rampas que rondan el 20%. A la salida de una curva con su correspondiente rampón ¡veo a Rufo! Lo tengo ahí mismo, enseguida me doy cuenta que las distancias son cortas pero el tiempo es mucho, se hace interminable. No puedo explicar cómo, pero de repente ni reserva ni leches, se me acabó la gasolina de repente, me quedaba aún un piñón por subir pero lo mismo daba, no iba más, pasé un momento crítico pero más por pundonor que por fuerzas descarté parar, aunque tuviera que subir a 5 por hora como iba ahora, afortunadamente ese pequeño descansillo que hay en una de las zetas estaba cerca y pude beber, pegar un resoplido y tomar aire para las dos rampas finales, que nos despiden de la ascensión a un 18%, penúltima rampa la hice muy bien, recuperado y con alegría, pero la última que yo empezaba cuando Rufo terminaba, se me hizo eterna......pero habíamos llegado, destrozado pero habíamos llegado y con mucho mejor ritmo que en nuestra ascensión del año pasado. Poco después llegó Pato (algo le han dado en Tucumán) y en lo alto las fotos correspondientes:
Rufo en lo alto, ¡qué bestia! subir así no puede ser bueno para el pedalier.....

Contento: mientras pueda subir aquí del tirón no va mal la cosa

[b]¡¡Marchando una de pato laqueado!!, jaja venía frito pero contento.[/b]

Después de una merecida parada recuperamos pulsaciones y comentamos la subida, al rato bajamos la pista de hormigón, bajando es aún más impresionante, parece mentira que hayamos subido por ahí. Llegamos al mirador donde sale la pista de la tubería, este tramo es con diferencia el peor de toda la ruta, pateo y más pateo entre piedrolos, luego tramitos pedaleando y más tramos de empuja-bike, aquí Pato nos demuestra que se puede bajar montado por donde otros a penas podemos mantenernos en pie.
En lo alto las antenas, de ahí veníamos.

Rufo, el enemigo de las piedras.

Tras la tubería, tomamos una pista rápida peligrosa porque estaba muy suelta como todo el terreno esta mañana a causa de la sequía y llegamos al camino Ortiz, bajada que Pato y yo exprimimos al máximo, ya que aunque tiene piedras y algunas raíces, su dificultad es baja pero muy disfrutona, hacía un año que no gozaba bajando con la Mtb, al enemigo de las piedras no le gustó tanto.
Pato en su salsa, disfrute total el de hoy: subir tras Rufo y bajar tras Pato, menudo espectáculo.

Finalizado el Ortiz, conectamos con la Barranca y a deshacer el camino hecho esta mañana hasta Mataelpino donde tomamos los coches sin perder un minuto que se nos había hecho tarde a todos.
Crónica especialmente dedicada a "los culottis" de Avila que se quedaron en casa: unos por lesión, otros por trabajo y otros por cobardeeeeeesssssss.
Por si alguien quiere alguna foto: https://picasaweb.google.com/dtgarrido/ ... 6297295906
El track y los datos técnicos los pone Pato.
Nos vemos.
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